Desde el pleno de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, presidenta de la Mesa Directiva, llamó a los legisladores a que México asuma un papel activo en los grandes desafíos globales. En el marco del conversatorio “80 años de la Carta de la ONU: Reflexiones sobre el multilateralismo y la democracia parlamentaria”, la diputada sostuvo que el país debe reafirmar su compromiso con los valores de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
López Rabadán recordó que los principios de la ONU —la paz, la cooperación y la dignidad humana— no son simples ideales diplomáticos, sino compromisos concretos que deben reflejarse en las leyes que impulsa el Congreso mexicano. “El multilateralismo no es una idea abstracta; es la convicción de que ningún país puede salir adelante solo”, expresó ante representantes de la ONU y funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Durante su intervención, la legisladora hizo hincapié en la necesidad de alinear las políticas públicas nacionales con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Subrayó que, aunque México ha avanzado, el país ocupa actualmente el lugar 72 de 167 en el cumplimiento de estos objetivos, una cifra que refleja la urgencia de reforzar los esfuerzos institucionales.
Recordó además que la ONU nació el 24 de octubre de 1945, tras una guerra devastadora, con la misión de construir un orden basado en la cooperación internacional y la justicia social. Gracias a ese espíritu, destacó, se crearon organismos que han sido fundamentales para millones de personas en el mundo, como el Programa Mundial de Alimentos, UNICEF y la Organización Internacional del Trabajo, pilares de la solidaridad global.
“Hoy conmemoramos 80 años de una institución que cambió la historia. La Carta de la ONU es más que un documento: es una promesa de paz, de desarrollo y de respeto a la dignidad humana”, afirmó López Rabadán.
La diputada hizo un llamado a los legisladores a traducir esa promesa en acciones concretas dentro del país, promoviendo leyes que impulsen la sostenibilidad, reduzcan las desigualdades y fortalezcan los derechos humanos.
Para cerrar su participación, López Rabadán insistió en que la democracia parlamentaria es la herramienta más poderosa para cumplir con los compromisos globales:
“México no puede quedarse al margen del futuro. Tenemos que ser parte del esfuerzo mundial por la paz, la justicia y el desarrollo sostenible.”
Con este mensaje, la presidenta del Congreso dejó claro que el reto no es solo conmemorar los logros de la ONU, sino honrar su legado actuando con responsabilidad global desde el Congreso mexicano.